domingo, 24 de mayo de 2015

"CAMBIANDO REGLAS, ROMPIENDO MOLDES"


¿Por qué existen los estereotipos de género?

ESTEREOTIPOS DE GÉNERO


Los estereotipos de género son el conjunto de ideas, mandatos y expectativas a partir de los cuales se establece un modelo de lo femenino y lo masculino en un contexto dado y se normativiza o categoriza a los miembros de la sociedad de acuerdo a ello.



En la sociedad es muy común encontrar estereotipos para cada uno de lo sexos, es decir, agrupar a la gente bajo un listado de características según sean hombres o mujeres. Las características que se asignan a cada sexo se basan en los roles e identidades que socialmente se le han asignado a los hombres y a las mujeres.

Ejemplos de estereotipos de género son: El rosa para las niñas, el azul para los niños”; “Una mujer de verdad es esposa y madre antes que nada”; “Un hombre de verdad es agresivo y bien macho”, “Las prostitutas están en la calle, usan mini falda, tacones altos y se pintan los labios de rojo” entre otros. Estos estereotipos son construcciones simbólicas asumidas como verdades y no leyes de la naturaleza respecto a lo que es una mujer o un varón.



Con el tiempo los estereotipos se naturalizan, es decir se asumen como verdades absolutas respecto a cómo son los hombres y cómo son las mujeres; con frecuencia se olvida cuestionar estos roles asignados y no se hace nada para cambiarlos.

Estos estereotipos implican valoraciones negativas y positivas de las personas y, por lo tanto, permite que algunos grupos sociales gocen de privilegios a la hora de conseguir un trabajo, tener una relación de pareja, acceder al estudio, a los servicios médicos, etc. Por ejemplo, un hombre blanco, adulto, de clase social alta, heterosexual, que viva en la ciudad pueden llegar a tener más facilidades para encontrar un trabajo que una mujer joven, indígena, que viva en una zona rural, debido, entre otras cosas, a las características asignadas a cada una de las condiciones que acompañan a la persona. Todo esto es lo que hay que conseguir cambiar.


ESTEREOTIPOS DE GÉNERO 816.jpg

MASCULINOFEMENINO
  • independientes
  • limitadas a la vida doméstica
  • líderes
  • dependientes
  • valientes
  • sentimentales
  • fuertes
  • delicadas
  • decididos

  • competitivos



Los estereotipos de género vulneran los derechos humanos porque son fuente de discriminación en contra de aquellas personas que no calzan con el paradigma que ellos proponen. Por ejemplo: Si el estereotipo dice que toda mujer de verdad desea ser madre y esposa, valora socialmente más a aquellas que cuadran con este paradigma, favoreciendo el ejercicio de estas funciones y dificultando el desarrollo de la mujer en otros ámbitos como por ejemplo: El ámbito laboral, donde aún la mujer recibe menos paga que el hombre por el mismo trabajo ya que se considera que su trabajo es “complementario” al del hombre (bajo el estereotipo que toda mujer es primero esposa) y “secundario” (bajo el estereotipo de que es primero madre)

Los estereotipos son dañinos para la vida social. En primer lugar porque niegan a priori la autonomía de la persona para definirse a sí misma más allá de ellos; segundo, establecen criterios de exclusión por cuestiones de raza, origen, religión, sexo y género; tercero, porque así como el estereotipo pauta que es lo “esperable” de acuerdo al género, también define cual es el ser humano a excluir, cuando no cumple con los requisitos del estereotipo. El estereotipo de género, crea sospecha y violencia sobre el derecho básico a construir una identidad propia y estar incluido en la sociedad de acuerdo a ella.

Los estereotipos de género impiden el disfrute igualitario de los derechos a hombres y mujeres y hacen que las políticas, programas y proyectos desarrollados en las comunidades lleguen de forma diferente a hombres y mujeres.

La implicación más clara de la existencia de estereotipos de género es el SEXISMO, el cual declara lo masculino como superior frente a lo femenino, creando relaciones de subordinación y discriminación entre los hombres y las mujeres. 


¿Qué son los estereotipos de género?

¿En qué se basan las características que se asignan a cada sexo?
¿Por qué se naturalizan con el tiempo los estereotipos?
¿Por qué son negativos los estereotipos de género?
¿Qué debemos hacer para extirpar los estereotipos de género de nuestra sociedad?

sábado, 16 de mayo de 2015

LOS VALORES Y MI SEXUALIDAD



SEXUALIDAD Y VALORES 

Los valores no son algo intangible que se pueden observar directamente, más bien se explicitan en la vida cotidiana, en la forma en que nos comportamos y relacionamos en casa con nuestros padres y hermanos (as)con nuestros amigos en la forma en que nos desempeñamos en la escuela, en las relaciones que establecemos con el enamorado (a) en el cuidado de nuestra salud y en la forma de vivir nuestra sexualidad.
Frente a una determinada situación existen muchas posibilidades de respuestas, entonces las personas nos vemos obligadas a elegir. Podemos optar frente a lo que nos parece bueno, frente a lo que nos parece malo o inconveniente y en este proceso de elección podemos equivocarnos. Por tanto es importante procurar no equivocarnos y adquirir un cierto saber vivir que nos permita acertar en nuestras elecciones.

La sexualidad es un gran valor que encierra múltiples valores humanos.Una vivencia sexual auténticamente humana debe estar en consonancia con nuestra naturaleza corpórea, racional, sentimental y social.Para ejercer nuestra sexualidad de forma responsable no solo basta con saber sobre métodos anticonceptivos y de protección para evitar embarazos no deseados o ETS, sino que es necesario desarrollar una cantidad de valores que permitan a la persona la toma de decisiones.  Hoy en día se sabe que la sexualidad no se reduce al sexo y las relaciones sexuales, sino que es un concepto que abarca la vida física, emocional y afectiva de las personas, tanto de forma individual como colectiva. 

Por esta razón, el placer sexual, que tiene su furor entre las etapas de la adolescencia y la juventud, no puede satisfacerse de manera desbordada. Si la persona solo busca satisfacer su deseo y placer no solo pone en riesgo su vida sino también la vida de los demás. 

En el caso del ser humano, el instinto sexual no puede desligarse de los afectos porque el individuo es una unidad. 

Nuestras actitudes y comportamientos sobre cómo vivir nuestra sexualidad también están influenciados por los valores convencionales. Si bien la sexualidad se experimenta de manera personal, muchos de los valores que se adoptan están determinados por la cultura en que se vive. En esta etapa nos damos cuenta de que no todas las personas que nos rodean tienen los mismos valores respecto a la sexualidad y por esa razón nos vemos confrontados con los valores de nuestros amigos y maestros, eso nos lleva a analizar y cuestionar nuestros valores convencionales y así progresivamente vamos construyendo nuestra propia  escala de valores que guiará nuestra vida.

VIVENCIA DE LA SEXUALIDAD Y LOS VALORES 
CONVENCIONALES

Por ejemplo: elegir una pareja con determinadas características físicas refleja una valoración, tanto de la persona como del grupo social. Lo que suele ocurrir es que muchas veces actuamos por "costumbre" porque todos lo hacen" o porque "siempre ha sido así"Si bien tenemos libertad para hacer nuestras elecciones  es importante que no nos dejemos llevar por la fuerza de la costumbre, porque podemos hacer elecciones que no son buenas, es decir, que no nos convienen.

Algunos valores convencionales no permiten  vivir una sexualidad de manera saludable ni a realizarnos como personas integras y autenticas.Por ejemplo un joven se puede sentir presionado socialmente a tener sexo para demostrar su "hombría" y le pide la "prueba de amor"a su compañera.
El proceso de transmisión de valores es lento, único y personal,pero se enriquece y revitaliza en la reflexión e interacción con los demás.



He aquí algunos de los valores humanos que deben ser vividos si buscamos realizar y disfrutar a plenitud nuestra sexualidad.

Aceptación de nuestro ser sexual en su totalidad lo mismo que el ser del otro. Se trata de un bien, una ocasión, un reto de vida.

Aprecio y cuidado. La sexualidad debe vivirse a plenitud, con emoción y con pasión, pero con arte y delicadeza; sin dañarnos ni hacer daño al otro. No puede reducirse a una actividad divertida, a un juego placentero pero superficial y sin sentido.

Conciencia, basada en el conocimiento de sus diversas dimensiones, de su sentido y de su importancia para la propia vida y para las relaciones sociales.
Respeto de la propia dignidad y la dignidad del otro, de los propios y ajenos sentimientos, convicciones y decisiones. No pretendamos que nuestras concepciones y comportamientos sexuales sean los únicos aceptables y deban de servir de modelo para todos. El respeto por la dignidad del otro nace de la conciencia de igualdad, matizada por las diferencias de convicciones, actitudes y comportamientos.

Las formas de vivir la sexualidad deben ser auténticas, es decir, nacer y cimentarse en principios. No debe haber contradicción entre aquello que se piensa y aquello  que se dice y hace. También hay que respetar la autenticidad del otro no buscando juzgarlo sino comprenderlo.

Tener conciencia de la dignidad lo mismo que de la repercusión y consecuencias de los propios actos. Toda experiencia sexual está cargada de grandes responsabilidades.

Sentir el gozo y alegría de vivir y convivir las experiencias sexuales en forma plena, racional y auténtica, superando el mero placer corpóreo y momentáneo.
Rodear la sexualidad de arte y belleza. Saborear lo hermoso, lo bello y lo sublime de la realidad sexual.

Somos seres racionales. Hay que moldear lo instintivo y lo inmediato, sin sacrificar la espontaneidad y naturalidad.

La sexualidad debe ir unida a la ternura, la nobleza y los delicados sentimientos.

La sexualidad es una expresión del amor, de la alegría de darse generosamente al otro para que crezca, sea más, viva más, disfrute más.

Lo importante es vivir estos valores a través de nuestra sexualidad, no tanto seguir las convenciones, normas y prejuicios de culturas y sociedades a menudo deshumanizadas.




1. ¿Con que debe estar en consonancia una vivencia sexual auténticamente humana?
2. ¿Para ejercer nuestra sexualidad de forma responsable que es necesario?
3. Nuestras actitudes y comportamientos sobre cómo vivir nuestra sexualidad también están influenciados por los valores convencionales ¿es positivo o negativo dejarse llevar en todo lo referente a nuestra sexualidad por los valores convencionales? Argumenta tu respuesta.
4. ¿Por que son importante los valores en la vivencia de nuestra sexualidad.

sábado, 9 de mayo de 2015

"APRENDO A SER LIBRE Y RESPONSABLE"


¿Es libre el hombre? Argumenta tu respuesta si es si o no.
¿Cuándo uno es libre?
¿Es lo mismo libertad que independencia?
¿En que consiste el libre albedrío?
¿ En conclusión qué es la libertad?


Ensayo sobre la libertad


"Dios mío ¿qué hago? ¿por qué estoy en esta situación?... ¡Maldita sea! Ya me equivoqué, ¿por qué diablos te hice caso?": En éstas u otras palabras, son las clásicas interrogantes y exclamaciones que a diario nos formulamos antes o después de llevar a cabo una conducta.

Sin embargo, las decisiones, determinaciones, elecciones ó designaciones que realizamos no siempre sabemos de qué están precedidas, si es acaso de la maravillosa libertad de qué hemos sido dotados los humanos ó si es de una ley inmutable que ya sabe de antemano lo que sucederá.¿Realmente existe la libertad? Sin duda, el desentrañamiento de este tema ha sido motivo de discusión entre filósofos de todos los tiempos,  Sartre, de Hegel, de Kant, del Barón d’Holbach o de Hartmann, por mencionar algunos.
Así, conocer si somos libres o no, o mejor dicho, conocer si podemos ser libres o no, creo que es lo menos que como individuos pensantes podemos hacer. Saber si lo que hemos realizado desde que usamos la razón o lo que tenemos planeado realizar como proyecto de vida, fue o será producto del ejercicio de nuestra libertad o tristemente resultado del movimiento de los hilos que Dios, el destino, la naturaleza o como suela llamársela haga de nuestra vida –marioneta. He aquí la importancia de saber si existe la libertad.
La libertad humana “El ser humano realiza miles de elecciones cada día. Algunas son trascendentales; algunas acertadas, otras equivocadas. Lo que sin duda alguna es cierto es el hecho de que las elecciones que hacemos son una parte importante en nuestras vidas, pero no estamos hablando de elegir, sino de actuar y vivir con libertad. Libertad es la facultad o capacidad del el ser humano de actuar o no actuar siguiendo según su criterio y voluntad. Libertad es también el estado o la condición en que se encuentra una persona que no se encuentra prisionera, coaccionada o sometida a otra.
Se utiliza esta palabra para referirse también a la facultad que tienen los ciudadanos de un país de actuar o no actuar siguiendo su voluntad siempre que esté dentro de lo que establece la ley.
Este término también hace referencia a 'confianza', 'franqueza' y, especialmente en su forma en plural, libertad significa osada familiaridad. 'Libertad' puede indicar también una falta de obligación. Procede del latín libertas, libertātis. La libertad se considera un derecho del ser humano y también un valor. Aparece en diversos ámbitos como en la Filosofía, Religión, Ética y Moral.El tema de la libertad y 'ser libre' forma parte de la naturaleza humana, aunque no existe una libertad absoluta, ya que las personas se ven condicionadas por sus propias capacidades y el entorno.Se suele aceptar que la libertad individual se debe ejercer con respeto y responsabilidad moral.
A pesar de que se trata de una de las características y derechos fundamentales del ser humano, la libertad en muchos casos se ve condicionada por factores externos que impiden la realización de la persona.
La libertad es un valor primordial, ya que permite que los demás valores existan.  En principio, la libertad es la situación donde uno tiene la posibilidad de actuar o no sin interferencias, presiones, ni constricciones.

Ahora bien, la libertad no puede ser absoluta o ilimitada. ¿Estás de acuerdo? El propio marco legal que establece y garantiza las libertades es, al mismo tiempo, uno de sus límites. Pero las leyes no son las malas de la película; no existen para darnos dolores de cabeza, ni estorbarnos; existen para demarcar el sentido y alcances de las libertades mismas, para que su ejercicio por parte de unos no menoscabe el derecho de otros; existen, pues, para que podamos convivir los unos con los otros en libertad. Por eso no se vale evadir el cumplimiento de la ley.

En otro sentido, la libertad significa que cada quien puede decidir por sí mismo obedeciendo sólo a su propio criterio y no determinado por otros. Esta definición se orienta más hacia la autonomía que cada uno tenemos, por ejemplo: la de vestir como me gusta o elegir el credo que quiera. Así, mientras que en el terreno individual la libertad entraña la capacidad de auto determinarnos y autogobernarnos, en el ámbito social la libertad remite al derecho y a la consiguiente responsabilidad de participar en las decisiones colectivas, como la formación de gobiernos, la discusión de las leyes y la elaboración de las políticas públicas; sólo participando de esta manera puede decirse que al obedecer las leyes y a nuestras autoridades nos estaremos obedeciendo a nosotros mismos.

¿Qué es la libertad para ti? Argumenta tu respuesta.
¿Qué significa ser libre?
¿Por que se dice que no existe una libertad absoluta?
¿Qué debemos hacer para vivir una libertad responsable?



viernes, 1 de mayo de 2015

"MIS PENSAMIENTOS DECIDEN LO QUE SOY"


¿Qué es una creencia?
¿Por que se dice que las creencias no son innatas?



Lectura: "Las creencias"
Las creencias, que en muchos casos son subconscientes, afectan a la percepción que tenemos de nosotros mismos, de los demás y de las cosas y situaciones que nos rodean.Muchas personas tienden a pensar que sus creencias son universalmente ciertas y esperan que los demás las compartan. No se dan cuenta que el sistema de creencias y valores es algo exclusivamente personal y en muchos casos muy diferente del de los demás. Nosotros no vivimos la realidad en si, sino una elaboración mental de la misma. Lo que hace que la vida sea un constante manantial de esperanza y ricas alternativas o una inevitable fuente de sufrimiento. Lo que vivimos tal como lo vivimos, depende más de la representación y elaboración de nuestro mapa mental, que del territorio "real" en sí. Por lo tanto el mapa no es el territorio.
A través de nuestro sistema de creencias y valores damos significado y coherencia a nuestro modelo del mundo, al que estamos profundamente vinculados. Cuestionar una de nuestras creencias puede desestabilizar todo el sistema al afectar a aquellas otras que se derivan o están relacionadas con ella. Esta es la razón por la que somos muy reacios, en muchas ocasiones, a modificar alguna de nuestras creencias.
Las creencias se forman a partir de ideas que confirmamos o creemos confirmar a través de nuestras experiencias personales.
Cuando una creencia se instala en nosotros de forma sólida y consistente, nuestra mente elimina o no tiene en cuenta las experiencias que no casan con ella.
Las creencias son una fuerza muy poderosa dentro de nuestra conducta. Es bien sabido que si alguien realmente cree que puede hacer algo, lo hará, y si cree que es imposible hacerlo, ningún esfuerzo por grande que éste sea logrará convencerlo de que se puede realizar. Todos tenemos creencias que nos sirven como recursos y también creencias que nos limitan. Nuestras creencias pueden moldear, influir e incluso determinar nuestro grado de inteligencia, nuestra salud, nuestra creatividad, la manera en que nos relacionamos e incluso nuestro grado de felicidad y de éxito.Son ideas que en un momento determinado llegaron a nosotros y porque si creímos, como el que cree que mañana sale el sol. Las creencias se han ido formando, ocupando un espacio, una energía, se han ido materializando dentro de nuestros conceptos más arraigados. Vienen a partir de lo que nos han dicho, de lo que hemos vivido, son maneras que nosotros creemos tener y ser, y que vienen más de otras personas, educadores, padres, experiencias de nuestros padres, por los medios de comunicación o en el momento que algo nos ha sucedido muy fuerte y se ha producido una impregnación en nuestro consciente o en nuestro inconsciente. Creencias a veces escondidas en nuestro inconsciente, y que están teniendo una repercusión extraordinaria en nuestras vida, y es difícil acceder a ellas .
Las creencias, por otro lado, pueden ser potenciadoras o limitantes. Las primeras nos ayudan y potencian la confianza en nosotros mismos y en nuestras capacidades, permitiéndonos afrontar con éxito situaciones complejas. Las segundas nos restan energía y nos inhabilitan para afrontar determinadas situaciones.
Para conseguir un pleno control de nuestra vida, debemos conocer cuáles son nuestras creencias esenciales, cambiar aquellas que nos están limitando y resolver los conflictos que pueden existir entre distintas creencias

¿Cómo damos damos significado y coherencia a nuestro modelo del mundo?
¿Cómo se forman las creencias?
¿Explica por que las creencias pueden ser potenciadoras o limitantes?
¿Qué debemos hacer para conseguir un pleno control de nuestras vidas?